Chicharito volvió a ser el protagonista

Sigue la ‘Operación 30 Puntos’. El Madrid no se rinde nunca y ayer sacó adelante un partido dificilísimo y hermoso ante un Celta que tiene un gran fútbol de ataque, animado por un jugador colosal, Nolito. Él abrió el marcador y él fue siempre un cuchillo por la izquierda, dejando en evidencia a Carvajal e Illarramendi, que acudía a la ayuda. Pero no era sólo él. Todo el juego de ataque del Celta tuvo velocidad, sentido y peligro, y apenas se tomó pausas. A cambio, se descubrió mucho atrás. Demasiado ante un equipo cuyos delanteros tienen la calidad de los del Madrid para el tramo final.

Así que el partido fue un toma y daca, a alto ritmo, con el Celta atacando a veces de forma desbocada y el Madrid consiguiendo de cuando en cuando retornos al área contraria con ventaja. Como ante el Atlético, James y Chicharito resultaron decisivos para ganar un partido que el Madrid no controló, pero del que acabó obteniendo un resultado contundente. Bien es cierto que en una de las fases de más agobio, con 2-3 en el marcador, el árbitro ignoró un estrepitoso penalti de Kroos a Orellana, indisimulable, muy a su vista. Balaídos se enfadó con razón. El Celta ha sufrido muy malos arbitrajes.

Con tan grande esfuerzo atacante del Celta sabe mal su derrota. Pero también es cierto que siempre jugó en el alambre, con cuatro atacantes puros y dos medios más bien creativos y los laterales muy avanzados. Le queda, sí, la hermosa exhibición de atrevimiento. En cuanto al Madrid, sorteó uno de los tres partidos difíciles que le quedaban. Aún tiene que visitar al Sevilla y recibir al Valencia. Está en su etapa reina, que ha empezado bien, pero queda terreno. Y sigue pendiente de que el Barça pueda ceder un empate, para lo que ya no se ve otra oportunidad que la visita al Manzanares. Pero lo que está claro es que el Madrid no se rinde.