CAVALIERS 92 - BULLS 99 (0-1)

Los Bulls de Gasol (21-10) limitan a LeBron y toman ventaja

Chicago gana en Cleveland el primer partido de su serie ante los Cavaliers y recuperan el factor chanca. Gran Gasol (21 puntos y 10 rebotes) y buen Rose (25 puntos).

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NBA

El Quicken Loans Arena de Cleveland ('The Q') ardió en tensión, lejos de la nieve que asedia a Ohio en los inviernos. Y del corazón de la tensión, los Chicago Bulls extrajeron ante los Cleveland Cavaliers una valiosísima victoria por 92-99, que les coloca con ventaja inicial de 0-1 en las semifinales de la Conferencia Este. Ya con la ventaja del campo a favor de los Bulls, la serie continuará en Cleveland en el segundo turno, en la noche del miércoles. Desde el 0-3 de salida (triple de Mike Dunleavy), de paso para un 2-13, los Cavs jamás disfrutaron de ventaja, aunque sí acertaron a empatar a 51 y 53, y en el minuto 42, el partido estaba en 84-86 para Chicago.

Las bajas de Kevin Love (hasta la temporada 2015-16) y del suspendido J. R. Smith, que regresará a partir del tercer partido, recortan decisivamente la profundidad de la plantilla de Cleveland, lo que obliga al tremendo esfuerzo extra de LeBron James (19 puntos con 9/22 en tiros y 0/3 en triples, 15 rebotes, 6 pérdidas... todo en 41:56 de acción) y Kyrie Irving: 30 puntos: 10/23 en tiros, 1/5 en triples, y seis asistencias en 43:58. Pese a la activa colaboración de Iman Shumpert (22 puntos en 41:23) contra la elaborada zona 2-1-2 de Chicago, el fondo del vestuario de los Bulls es mucho más rico: cuatro jugadores de Chicago anotaron 14 o más puntos, con tres más allá de la veintena: Derrick Rose (25 tantos,11/26 en tiros, cinco asistencias, dos pérdidas), Pau Gasol (21 puntos en 10/16, más diez rebotes y cuatro tapones, sexto 'doble doble' en estos playoffs) y, en fin, Jimmy Butler: 20 puntos en 44:12 de acción, más la asignación principal en la defensa individual sobre LeBron James, que usualmente jugó de espaldas al aro, en posición de 'cuatro' o 'power forward': obligado por la baja de Love, claro. Los Bulls fueron mucho mejores en triples (10/18, 55,6%, por 7/26 de los Cavs, 26,9%), porcentaje total de tiros de campo (50% de Chicago, 42% de Cleveland) y también en rebotes: 42-39 para el equipo que dirige Tom Thibodeau. La participación de Niko Mirotic resultó testimonial: solamente una falta personal durante 2 minutos y 25 segundos de estancia en pista, sin nada más que añadir. Desde 2007/08 Pau Gasol ha conseguido 55 'dobles-dobles' en playoffs, superado en este ciclo por los 61 de Tim Duncan.

Desde el 2-13 del minuto cinco, con Dunleavy acertando cinco tiros sin fallo (3/3 en triples, hasta 14 puntos totales), los Bulls escaparon sin remedio hasta el 11-25 del minuto diez. "Es un reto para nosotros mantener este ritmo, pero este es el ritmo que me gusta y el que queríamos imponer", comentaba Thibodeau, vigilado de cerca por su 'enemigo íntimo' John Paxson, director de operaciones y Vicepresidente Ejecutivo de los Bulls.

Arreó Irving, con diez puntos consecutivos, y sobrevino un 10-2 para Cleveland, desde 23-37 a 33-39. Gasol, que se las veía con Timofey Mozgov (nueve puntos, cinco rebotes) refrescó la serenidad de su equipo y los Bulls se plantaron con 44-49 en el descanso, primera vez que Cleveland no llega con ventaja a un intermedio en playoff desde... 2009.

Shumpert y Mozgov, menos presionados por la defensa de Chicago, implantaron el 53-53 en el 25... pero justo entonces fue cuando los Bulls sacaron a relucir lo que había exigido el propio Gasol antes de salir a la pista de The Q: "Intensidad, concentración y preparación mental". En tres minutos, con un explosivo 0-15, Rose en el puente de mando y 11 puntos sin fallo de Pau Gasol, los Bulls demarraron hasta 53-68 y asestaron un golpe de timón que abrió la brecha definitiva. Aunque el tercer cuarto concluyó con 70-81 para Chicago, Cleveland ya no se iba a recuperar del 'shock' de haber llegado al empate... solo para dejar escapar la situación entre un océano de impotencia. Con los Cavs a trancas y barrancas, David Blatt imploraba: "Necesitamos más rapidez y subir el ritmo".

Así, con Kirk Hinrich en pista sin poder detener a Irving y a tope de agresividad defensiva, Cleveland se acercó: 84-86 y 86-89 a 5:00 del final. En esos instantes cruciales un tenso LeBron incurrió en vitales pérdidas de balón y deficientes selecciones de tiro, ante esa defensa de Chicago especialmente concebida para desgastar y agobiar a 'King' James. A 30 segundos del fin, Butler imponía el insalvable 90-96. Ocho segundos después, Rose se iba al banquillo doliéndose de un impacto en el brazo derecho tras salida de bloqueo. Este episodio no dio sensación de gravedad: cuando todo terminó, los Bulls festejaban ruidosamente el triunfo en el centro de 'The Q', Cleveland, Ohio: en la noche del miércoles, los felices vencedores tienen que regresar bajo los focos de The Q y bajo la mirada ceñuda de 'King' James. Pero Chicago ya vence. Es 0-1. Habrá batalla entre Cleveland, Ohio, y Chicago, Illinois. Una oscura y sorda batalla de atrición.